Pertenecer a una Cofradía implica mucho más que vestir un hábito o tocar un instrumento; representa un compromiso profundo, una colaboración constante, un sentido de responsabilidad, y, sobre todo, la voluntad de vivir conforme a los valores y enseñanzas de Cristo.
Valoramos enormemente el espíritu de hermandad que nos une y nos motiva a apoyarnos mutuamente, tanto dentro como fuera de la Cofradía, fomentando una convivencia genuina y enriquecedora. Nos llena de orgullo construir una comunidad cristiana cimentada en estos principios fundamentales.
Confiamos en que su experiencia como miembro de nuestra Cofradía sea gratificante y significativa, y que juntos podamos seguir fortaleciendo nuestra fe y compartiéndola durante todo el año.